Las frecuentes balaceras con que son asesinadas tantas gentes en los Estados Unidos, son consecuencia de que adultos, jóvenes y hasta niños andan armados hasta los dientes, ya que la venta y fabricación de toda clase armas, es una de las industrias más boyantes en la tierra del Tío Sam, que si las portan personas afectadas de sus facultades mentales como sucede en la mayoría de los casos, a diario se les regresa en crímenes y asesinatos a plena luz del día, por el uso desmedido de esas “armas” mortales.