En lo más profundo de la tundra siberiana crece un árbol capaz de anunciar el invierno y anticipar la llegada del deshielo. Pero su historia va mucho más allá de lo botánico: es un símbolo de resistencia, ingenuidad y esperanza en uno de los paisajes más despiadados del planeta.
Thomas Handley | 31 de julio de 2025